Abi y Oba

Me ha dicho Oba que Abi se siente cómoda con él. He tenido un episodio de celos silencioso. Pero no ha durado mucho. He de reconocer que hacen una buena pareja. A Oba lo conocí en una de las reuniones de los Nicóticos. Habría que estar allí para ver los intercambios de miradas. Yo creía haber superado lo mío con Abi. Pero nunca se sabe. Mi ego herido, etc. Después me dio por hablar con Oba. Y lo odié intensamente. Me hablaba con un cariño insólito. Cuanto más amable, más lo odiaba. Esa noche andaba hablando con Vilas y con Miguel F. Cuando llegué yo empezó a analizar la obra de Taylor, Fuentes del yo. La identidad del yo moderno tenía un pasado tumultuoso. Yo sólo quería marcharme. Luego, con el tiempo recordé la película Almost in love. Y vi los paralelismos. Un encantador de serpientes, Oba, pero con buen fondo, hacía un despliegue de conocimientos y simpatía que hacía imposible no caer rendido a sus pies. Al menos por un tiempo. Ya Vilas, me advertía, que era un narcisista. Y ¿no lo somos todos?, le decía yo. Sólo hay que ver lo que ha pasado en el confinamiento. Mi hermano me lo dijo ayer tomando café. Todo lo que hacemos lo hacemos para que nos vean hacerlo. Si no, parece que no lo hemos hecho. Si viajamos y no lo decimos por Face o Insta o en una cena con amigos donde compartimos fotos e impresiones como si fuese una aventura de supervivencia convertida en un souvenir, parece como si no lo hubiésemos hecho. No nos vale la experiencia per se. La vida como una exploración turística, un espectáculo. Una experiencia de face. Si tomáramos conciencia, viviríamos perplejos, pero no haríamos nada. Estamos condicionados biológicamente para hacer cosas. Perdernos en la inercia. Esa es la manera que tiene la especie de sobrevivir. El que reflexiona demasiado, se queda solo. Como yo aquella noche, donde Oba y Abi brillaban con un Taylor de fondo hipnótico. El yo moderno y los Nicóticos en una danza casi primaria. Mientras yo aguardaba en un rincón, ensimismado en mis pensamientos. Casi un confinamiento previo. Muy narcisista todo, lo sé. 

Chico Talens. Crónicas nicóticas. 

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